As a reader of this blog, you are likely aware that we are big believers in praising children, especially when using labelled praises. You might be less aware that experts have debated the effects that praise may have on children for decades. Research shows that praise positively affects children, including improving behaviour, motivation, and academic achievement (discussed below). Some researchers have, however, argued, most notably and controversially Alfie Kohn (Kohn, 2001) in his article ‘five reasons to stop saying “good job!”‘, that praise may also have negative effects, including manipulating children (by taking advantage of children wanting adult approval); creating praise junkies (meaning that children rely on our evaluations of what is good or bad rather than making their own evaluations); stealing a child’s pleasure (by not allowing the child to decide how they feel especially when they have accomplished something); losing interest (children may lose interest in activities they are praised for, as they become more motivated by praise rather than engaging in the activity itself; and reducing achievement (by losing interest in the activity)
Though the premise of Kohn’s article was that praise might be bad for children, he also noted that there are times when parent evaluations and reinforcement are necessary- especially for toddlers and preschoolers. Furthermore, the article did not consider the different praise types. For example, process praise (i.e., praising related to effort), compared to person praise (i.e., praise relating to someone’s traits), when engaged in by parents of children aged 1-3 years, motivates academic achievement during primary school (Gunderson et al., 2018). Also, labelled praise, compared to non-labelled praise, improves behaviour in school-aged children (Royer et al., 2018). Therefore, the question should not be “whether to praise” but rather “how to praise” children.
When deciding how to praise, take into consideration the research evidence. Process-oriented (Gunderson et al., 2018) and labelled praise (Royer et al., 2018) have been shown in research studies to result in improved outcomes for children. Furthermore, for praise to be as effective as possible, it should also be genuine (i.e., praise behaviour that you are genuinely impressed by and want to see more off), as children will be able to see right through non-genuine praise, and the praise will lose its power. For more information on labelled praise and the importance of praise, check out these blog posts:
Labelled praise || Elogios etiquetados
Why we love labelled praise || Por qué amamos los elogios etiquetados
Español
Como lector de este blog, debe ser obvio para ti que somos grandes creyentes en elogiar a los niños, especialmente usando elogios etiquetados. Per es posible que no sepas que los expertos han debatido durante décadas los efectos que los elogios pueden tener en los niños. Las investigaciones muestran que los elogios afectan positivamente a los niños, lo que incluye mejorar el comportamiento, la motivación y el rendimiento académico (discutido a continuación). Sin embargo, algunos investigadores han argumentado, sobre todo y controvertidamente Alfie Kohn (Kohn, 2001) en su artículo ‘cinco razones para dejar de decir “¡buen trabajo!”‘, que los elogios también pueden tener efectos negativos, incluida la manipulación de los niños (aprovechandose que los niños tengan deseos de aprobación por los adultos); crear adictos a los elogios (lo que significa que los niños confían en nuestras evaluaciones de lo que es bueno o malo en lugar de hacer sus propias evaluaciones); robar el placer de un niño (al no permitir que el niño decida cómo se siente, especialmente cuando ha logrado algo); pérdida de interés (los niños pueden perder interés en las actividades por las que son elogiados, ya que se motivan más por los elogios en lugar de participar en la actividad en sí); y reducción del rendimiento (por la pérdida de interés en la actividad)
Aunque la premisa del artículo de Kohn era que los elogios pueden ser malos para los niños, también señaló que hay momentos en los que es necesario que los padres evaluen y refuercen, especialmente para los niños pequeños y en edad preescolar. Además, el artículo no consideró los diferentes tipos de elogios. Por ejemplo, el elogio del proceso (es decir, elogio relacionado con el esfuerzo), en comparación con el elogio de la persona (es decir, elogio relacionado con las características de alguien), cuando lo realizan los padres de niños de 1 a 3 años, motiva el logro académico durante la escuela primaria (Gunderson et al., 2018). Además, los elogios etiquetados, en comparación con los elogios no etiquetados, mejoran el comportamiento de los niños en edad escolar (Royer et al., 2018). Por lo tanto, la pregunta no debería ser “¿elogiar?” sino “¿cómo alabar?” a los niños.
Al decidir cómo elogiar, ten en cuenta la evidencia de la investigación. Los estudios de investigación han demostrado que los elogios orientados al proceso (Gunderson et al., 2018) y etiquetados (Royer et al., 2018) dan como resultado mejores resultados para los niños. Además, para que los elogios sean lo más efectivos posible, también deben ser genuinos (es decir, elogiar el comportamiento que realmente te impresionó y deseas ver más), ya que los niños perciben cuendo los elogios no son genuinos, y la alabanza perderá su poder. Para obtener más información sobre los elogios etiquetados y la importancia de los elogios, consulta estas publicaciones de blog:
Labelled praise || Elogios etiquetados
Why we love labelled praise || Por qué amamos los elogios etiquetados
References / Bibliografia
Gunderson, E. A., Sorhagen, N. S., Gripshover, S. J., Dweck, C. S., Goldin-Meadow, S., & Levine, S. C. (2018). Parent praise to toddlers predicts fourth grade academic achievement via children’s incremental mindsets. Developmental Psychology, 54(3), 397.
Kohn, A. (2001). Five Reasons to Stop Saying” Good Job!
Royer, D. J., Lane, K. L., Dunlap, K. D., & Ennis, R. P. (2018). A systematic review of teacher-delivered behavior-specific praise on k–12 student performance. Remedial and Special Education, 40(2), 112-128. https://doi.org/10.1177/0741932517751054